martes, 21 de septiembre de 2010

Decisiones.

No tengo valor para decir esto y luego recibir una respuesta, así que, si ves esto, hazme un favor.

Desaparece. No quiero que me vuelvas a hablar, nada. Absolutamente nada.

No te puedo dar ninguna razón porque lo cierto es que no la tengo. Y sé que esta noche no podré dormir, y sé que mañana no querré vivir, y sé que esto me va doler muchísimo.


Pero tengo que entender que no puedo cambiar las cosas tal y como están. Tú tienes tu vida y yo la mía.

No te equivoques, no voy a hacer como con otras tontas rabietas de las que me han dado. Pienso dejar tu foto en mi habitación y pienso seguir llevando la púa encima siempre. No voy a hacer como que nunca has existido en mi vida. Has sido mi mejor amigo, y me has enseñado muchas cosas. Gracias por todo, espero de verdad que algún día pueda devolverte toda la ayuda que me has dado. Si realmente en algún momento sientes que me necesitas, que quieres contar conmigo como lo hacíamos antes, voy a estar aquí. Pero si no es nada relevante, lo siento mucho pero te voy a ignorar.


Lo único que pretendo con esto es deshacerme de esa adicción a ti que me tiene atada de pies y manos. Esa que me hace estar tranquila cuando hablo contigo y esa que me hace querer morir cuando desapareces.

Por unos motivos o por otros, eso ya es relevante. Créeme, ahora mismo dudo de si publicar esto o no, pero al final lo haré, y me arrepentiré, y al cabo de un tiempo veré que fue la mejor decisión. Pero ahora te voy a echar tanto de menos… Voy a seguir viviendo en mis amadas fotografías, que no me hacen tanto daño como la realidad. Poco a poco, espero conseguirlo.


Y así quizás puede que en algún momento te mire sin sentir como mi corazón despierta. Así quizás algún día pueda recordar tus palabras y sonreír de nostalgia en vez de llorar por dolor.

Así quizás algún día te vea y sea capaz de quitarte los ojos de encima. Algún día…

Y espero que puedas perdonarme ya todas las tonterías de críos que haré para no tener que verte. No sé lo que voy a hacer, así que, perdóname.


Me gustaría decirte tantas cosas antes… Pero no puede ser. Ya te lo he dicho todo. Espero que sepas que esto lo hago contra mi propia mente. Te quiero demasiado, no siento rencor alguno, pero sé que tengo que aprender a vivir sin ti. Lo has sido todo para mí, y mataría por que lo fueras aun, pero no puedo seguir manteniendo una amistad que no existe. Pero siempre que vea un amanecer, me acordaré de ti. Ahora solo me queda decirte…


Muchas gracias, perdóname, te quiero, te odio, te echaré de menos, adiós.

No hay comentarios:

Publicar un comentario